Que la Iglesia sea germen
y núcleo de una humanidad reconciliada
y reunida en la única familia de DIOS
mediante el testimonio de todo los fieles
en la diversas Naciones del Mundo.
Sed hombres y mujeres
libres y responsables,
haced de la familia
un foco que irradie paz y alegría.
Ser promotores de la vida
desde el inicio hasta su final natural,
amparando a los ancianos
pues merecen el respeto
y la admiracion por el bien
que os han hecho.
Sepan ser protagonistas de una sociedad
más justa y fraterna,
cumpliendo con las obligaciones ante el estado,
respetando las leyes
y no dejandose llevar por el odio
ni por la violencia,
siendo ejemplo de conducta cristiana
en el ambiente profesional y social
y distinguiendose por la honradez
en las relaciones sociales y profesionales.
Tenga en cuenta que la ambición
desmedida de riqueza y poder,
lleva a la corrupción personal y ajena,
y no existen motivos que justifiquen
hacer prevalecer las propias aspiraciones humanas
tanto económicas como políticas
con el fraude y el engaño.
Siempre tengan como fuente de imspiración
el Evangelio y la doctrina social de la Iglesia
para la construcción de una sociedad
más justa y solidaria..reconciliada y pacifica
promoviendo el orden democrático y el bien común
Benedicto XVI
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