martes, 10 de agosto de 2010

PAX


La verdadera Paz de corazón
nace de una auténtica actitud del hombre....
de una valiente mirada introspectiva
y de una interesada actitud de escucha.

DIOS  habla en el interior del hombre,
y cuando éste aprende a escuchar
en el silencio de su corazón
e intenta poner en práctica
esa divina sabiduría,
allí comenzará el hombre
ayudado por la Gracia
a vislumbrar la verdadera Paz.

Solo viviéndola,
podrá practicarla y enseñarla
a una sociedad ávida de Paz,
que le indiquen la verdadera Senda
que lleva a lo único
por lo que vale la pena jugarse la vida,
que es el autentico amor al Creador
y a los hombres en DIOS.

Mientras el hombre
no se ordene interiormente
y no escuche esa Voz.
carecerá de Paz y de Orden
en su vida.

La Paz... don confiado a los hombres,
exige una restauración cierta de orden moral,
con un respeto pleno a la dignidad
del hombre y de la familia.

Es el desafio de nuestro tiempo
y de nuestra condición de cristianos
que no termina en la pública confesión de la Fe,
sino en la encarnación 
y en la exigencia de aportar
un verdadero compromiso
a los hombres
que tienen verdadera
hambre y sed de justicia..

Gustavo Manuel

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